Probablemente la separación entre artes mayores y menores vino de la distinción por parte de la crítica de arte de lo «bello» y lo «útil» a lo primero se le concedió una categoría más elevada, pues parecía dirigirse más directamente al intelecto y/o el espíritu, mientras que lo segundo tenía una finalidad más práctica y mundana Esta distinción no dejaba de ser subjetiva